Cirugía de la mano en la Unidad de la Mano de A Coruña: deficit de extensión activa de la articulación metacarpofalangica, con extensión conservada de la articulación interfalangica proximal (IFP) y distal (IFD)Cirugía de la mano en la Unidad de la Mano de A Coruña: deficit de extensión activa de la articulación metacarpofalangica, con extensión conservada de la articulación interfalangica proximal (IFP) y distal (IFD)

 

 

Tras 1 semana, sus familiares y su jefe, notan que no puede mover con normalidad el 3º dedo, motivo por el que le derivan a nuestra consulta.

A la exploración física se observa el 3º dedo en actitud caída tanto en la visión anterior como en la lateral, donde sobresale con respecto a los otros dedos. Presenta un deficit de extensión activa de la articulación metacarpofalangica, con extensión conservada de la articulación interfalangica proximal (IFP) y distal (IFD), además de una cicatriz en el dorso de la mano que ya está cicatrizada.

Con el diagnóstico de sospecha de sección completa del tendón extensor del 3º dedo, se indica tratamiento quirúrgico. Se le realiza anestesia regioanl, mediante bloqueo anestésico del plexo braquial. Se aplica un torniquete para obtener un campo quirúrgico exangüe. S realiza un abordaje dorsal sobre la cicatriz previa y se localizan los cabos tendinosos proximal y distal, con una minima disección para evitar disminuir la vascularización tendinosa y crear más adherencias por las cicatrices internas. Se realiza la sutura tendinosa (tenorrafia) mediante una sutura central en "U" y otra de refuerzo epitendinosa para regularizar los bordes de la reparación y facilitar el deslizamiento del tendón. Se cierra la piel y se coloca una férula de yeso.

 

Cirugía de la mano en la Unidad de la Mano de A Coruña:Abordaje dorsal sobre la cicatriz previaCirugía de la mano en la Unidad de la Mano de A Coruña: sutura tendinosa (tenorrafia) mediante una sutura central en

 

 

El postoperatorio transcurre sin incidencias, se retiran las suturas de piel a las dos semanas y la férula a las 3 semanas, tras lo cual la paciente comienza la fisioterapia. Tras 10 sesiones, la función de la mano es la misma que antes del accidente y se le da el alta a la paciente.

Las lesiones de los tendones extensores, pueden pasar desapercibidas debido a que la extensión de las IFP e IFD, está asistida por la musculatura intrínseca de la mano, por lo que al haber cierto grado de extensión se puede considerar normal y pensar que el deficit de extensión se debe al dolor o a la inflamación. Si la lesión se diagnostica tardíamente, pasadas más de 3-4 semanas, el pronostico postoperatorio de la recuperacion de los rangos articulares de movimiento empeora, pues se produce una retracción tendinosa del cabo proximal del tendón cortado, motivo por el cual a veces es necesario la utilización de injertos tendinosos.